«The Book of Kevin» (El Libro de Kevin)
Parece que ha pasado una eternidad pero todo llega. «The Leftovers» regresa con su tercera y última temporada para alegría de los espectadores que hemos encontrado en la ficción creada por Damon Lindelof y Tom Perrotta para HBO algo extraordinariamente intenso y sobre todo diferente a cualquier otra experiencia televisiva o cinematográfica.
Es el inicio de la despedida. El comienzo del fin. El arranque de un esperado viaje que durará ocho semanas y en el que cada lunes esta web tratará de ofrecerse como punto de encuentro a todo aquel que le apetezca una travesía en compañía. Aquí trataré de seguir la linea de la temporada anterior, con reviews semanales dedicadas a intentar analizar de la manera más pormenorizada posible cada pequeño detalle, especular con posibles teorias, comentar valores cinematográficos… En definitiva compartir las maravillosas sensaciones que esta magnífica serie genera desde el comienzo de su emisión.
Agradeciendo de nuevo el seguimiento de las reviews de la pasada temporada y el apoyo reflejado a través de vuestros mensajes y comentarios, siempre con la recomendación de que no leáis la review hasta después de ver el episodio para no estropearos la experiencia, nos sumergimos de lleno en «The Book of Kevin». ¡Buen viaje a todos!
Si habéis seguido las noticias sobre la serie durante el último año y tres meses, la única palabra que ha transcendido durante el rodaje y la promoción es Australia. Lo único que sabemos antes de afrontar los ocho episodios finales es que la trama experimentará un cambio de escenario con un significado claro y directo, según palabras del propio Damon Lindelof. Según declaró en una entrevista, en su tercio final, el tema principal de la serie será el fin del mundo y Lindelof ha pensado que lo ideal para ello es situar la trama en el lugar que para él es la representación del fin del mundo geográficamente hablando. Sin embargo lo primero que parece indicar el episodio es que el viaje a la tierra de los canguros se hará esperar, ya que a los pocos minutos de metraje descubrimos que, a diferencia de la temporada anterior en la que directamente se nos situaba en Miracle, «The Book of Kevin» opta por ser continuista e iniciar la trama justo en el momento donde terminó la anterior.
Un cold opening que nos retrotrae al año 1844 relata sin palabras el fervor religioso sobre la visión cristiana de la Ascensión a través de una mujer de fe inquebrantable. La secuencia sirve como preciso resumen del sentimiento de vacío e incomprensión en el alma de los que no son «elegidos» y el germen de la base de la ideología de los Culpables Remanentes dos siglos después, como parece indicar la vestimenta blanca con la que los creyentes afrontan su deseada partida y la manera en que enlaza con la actualidad y con los miembros del culto que tomaron el centro de visitantes de Jarden.
Trás un comienzo suave, la trama actual se inicia de la manera más impactante posible, haciéndonos testigos de los contundentes medios para dar fin a la «invasión» de los recordatorios vivientes en la milagrosa ciudad texana. Nada menos que un dron equipado con un misil que deja un cráter a su paso en el lugar donde se refugiaron 93 miembros de la secta, entre ellos la sorprendida Evie Murphy y una serena Meg, asumiento el componente suicida de su misión. Un escape de gas y un cigarrillo encendido son las causas de la violenta explosión según la versión oficial para ocultar los hechos.
De la misma manera que en el episodio piloto de la serie, la trama salta tres años en el tiempo. Si la primera temporada se iniciaba a pocos días del tercer aniversario de la Marcha Repentina, «The Book of Kevin» ejecuta un salto de otros tres años para mostrae como han cambiado las cosas en Jarden y empezar a situar a cada personaje a pocos días del séptimo aniversario de aquél fatídico 14 de Octubre que cambió el mundo para siempre. A partir de aquí el episodio se ocupa casi en exclusiva de ello empezando por Kevin, convertido en jefe de la policía de Jarden con su hijo Tommy a su cargo siguiendo la tradición familiar.
Continuando con el juego de espejos a nivel de estructura de guión con la primera temporada, la máxima preocupación del jefe Garvey es mantener el orden y la paz en un Jarden al que puede acceder cualquiera, sin ninguna restricción (incluidos los chalados adoradores de Gary Busey) ante cualquier conato de disturbio que pueda causar la inminente llegada del aniversario. Poco a poco, a medida que avanza el episodio vamos descubriendo el punto en el que se encuentran las vidas de cada uno del resto de los personajes, empezando por Nora que ha retomado su trabajo en la DSD, división gubernamental que aborda los temas relacionados con la Marcha. Todo desprende felicidad y estabilidad en la nueva vida de los Garvey y los que los rodean mientras se preparan para celebrar el cumpleaños de Tommy.
Justo antes de la fiesta, descubrimos también que Matt se ha convertido en la figura principal de la Iglesia en Jarden en la que trabaja codo con codo con Michael Murphy y que también vive feliz junto a una Mary completamente recuperada y su hijo de dos años, Noah.
La evolución más radical y sorprendente sin duda es la de John Murphy, que aparece en pantalla como sustituto de Isaac, actuando como medium y contactando con los familiares muertos de todo aquel creyente que esté dispuesto a pagar y dejar su mano impresa en pintura. La sorpresa es momentanea ya que todo forma parte de un plan en el que junto a Laurie (con quien ha iniciado una relación sentimental) se ocupa de proporcionar consuelo y terapia encubierta a los que se acercan en busca de respuestas. De hecho ni siquiera quiere sacar provecho económico de ello y destruye cada billete que le pagan. Kevin acude a Laurie para que se ocupe de los delirios de Dean, más conocido como el «Mataperros» de la primera temporada, que ha abandonado Mapleton en busca de Kevin para exponerle la evolución de su fijación por los cánidos a través de una nueva y delirante teoría: Los perros han adoptado forma humana y están alcanzando puestos de poder en la sociedad.
La aparición de Dean sirve como guiño y recupera un personaje bastante relevante en la primera temporada del que no habíamos vuelto a saber nada para cerrar su participación en la serie (de una manera violentísima) pero también representa una muestra más de la abundancia de teorías apocalípticas que afloran a medida que se acerca el séptimo aniversario de la partida. El ambiente está impregnado de una calma tensa y cada uno se prepara a su manera ante una sensación global, casi una certeza, de que algo va a pasar el 14 de Octubre. El propio Matt anuncia a sus fieles que si algo ocurre, el lugar más seguro será Miracle, poniendo como ejemplo su experiencia propia y la de su mujer. Esa es ahora la máxima preocupación del clan Garvey/Murphy: contener cualquier tipo de acto de exaltación o de locura que rompa el clima de estabilidad y paz que reina en la ciudad.
Durante la fiesta de cumpleaños de Tommy y su jornada posterior se empieza a atisbar que no todo es tan de color de rosa en la vida de los protagonistas. La pequeña Lily ya no forma parte de la familia Garvey (seguramente más adelante sabremos el motivo) y Nora no termina de superarlo. Kevin no ha sido capaz de pasar página trás las extremas experiencias que vivió y se autoasfixia en la soledad de su habitación, probablemente con la duda permanente de si realmente es inmortal instalada en su mente. Tampoco la vida de Mary Jamison es tan maravillosa como aparenta ser y con su decisión de abandonar a Matt harta de su fervor religioso y su sobreprotección que la obliga a no abandonar Jarden temiendo un retorno a su estado catatónico, revela a Kevin el motivo de ciertos comportamientos y las extrañas miradas sobre él durante la fiesta.
Matt está reflejando en un libro con todo detalle las extrañas experiencias vividas por Kevin y tanto él como Michael y John han llegado a la misma conclusión: Kevin es el elegido. Una especie de nuevo mesías cuyo papel será decisivo a la hora de evitar el presunto apocalipsis que se avecina. La reacción del jefe Garvey es una mezcla de rabia, indignación y confusión ante los contundentes argumentos y sus propias dudas después de sus dos «resurrecciones». Dudas que se reflejan no sólo en el episodio de la autoasfixia, si no en la manera en que se lanza al lago presuntamente contaminado por los manifestantes o hechos como la oportuna intervención de Tommy en el tiroteo con Dean.
«The Leftovers» ha vuelto con todas sus señas de identidad intactas. «The Book of Kevin» se dedica a situar a los personajes y establece las bases de su trama sin escatimar en impacto y sorpresas, como ese juego con las lineas temporales marca de la casa que sitúa el epílogo en el futuro con una envejecida Nora que vive en Australia ocultando su identidad (se hace llamar Sarah), reniega de Kevin y lleva palomas mensajeras a una iglesia, cerrando magistralmente la simetría argumental con el flashback que abre la temporada y las palomas que anuncian la fecha de la Ascensión a los feligreses. Quedan trece días para el fin del mundo pero tenemos un nuevo mesías al que aferrarnos para nuestra salvación.
Detalles del episodio:
- Episodio dirigido por Mimi Leder, que también dirige el tercero y el episodio final de la serie.
- La canción que suena durante el flashback inicial es «I Wish We’d All Been Ready». La letra del tema, interpretado por el grupo de folk cristiano Good News Circle, encaja perfectamente con la interpretación cristiana de la Marcha Repentina a lo largo de toda la serie.
- El hombre que vive en lo alto del pilar a la entrada de la ciudad continúa allí como si nada hubiese pasado.
- Los jovenes juerguistas que acampan a la entrada de Jarden han instalado un gigantesco hinchable con la apariencia del actor Gary Busey al que veneran y del que esperan su regreso en la fecha señalada. El actor que interpretaba al mítico villano de «Arma Letal» entre otros, aparecía en el episodio piloto de la serie en un noticiario de televisión que enumeraba las celebridades desaparecidas. Busey forma parte de esa lista junto a otros famosos como Jennifer Lopez, Salman Rushdie o el Papa Benedicto XVI.
- Ante la entrada de Kevin en su despacho, Michael cierra inmediatamente el navegador de su ordenador. La web que estaba mirando es «The Mapleton Gazette», posiblemente buscando hechos de la vida de Kevin dignos de añadir al libro.
- Mientras Kevin se prepara para su sesión de autoasfixia, suena «The 59th Street Bridge Song» (Feelin’ Groovy) de Simon & Garfunkel, artistas habituales en la banda sonora de la serie.
- John ha pasado de ser el miembro más radical del bando «racional» de la serie a ser uno de los abanderados de la fe. No solo admite que Kevin pueda ser la reencarnación de Cristo, si no que además cree que su hija Evie regresará como ya hizo una vez.
- Tendremos que esperar al segundo episodio para saber si la serie estrenará nueva secuencia inicial de créditos. «The Book of Kevin», al igual que el piloto de la serie, solo muestra los créditos al final.
- El flashforward da a entender que la Nora del futuro se encuentra en Australia por el paisaje y porque la parroquia donde lleva las palomas es la Iglesia Anglicana de St. Mary MacKillop (o Santa María de la Cruz), religiosa católica y primera australiana en alcanzar la categoría de santa.
- El perro comiéndose al sandwich de Dean y la frase de Matt «Te queda bien la barba». Agradecidas y sutiles muestras de humor en un show de enorme calado dramático.
- En la escena en la que es presentado Kevin conduciendo a los recién llegados a Jarden (¿otra alegoría a Cristo?) y en la escena final en la que está a punto de quemar el libro suena el tema gospel «Sign of the Judgment» (Señal del Juicio) de The McIntosh County Shouters.
Preguntas sin respuesta (de momento)
- ¿Por qué Nora tiene un brazo escayolado?
- ¿Qué ha sido de la pequeña Lily?
- ¿Visita Kevin «el otro lado» durante sus sesiones de autoasfixia o solo lo hace para probarse que no puede morir?
- ¿Volveremos a ver a Jill o la decisión de enviarla a la universidad supone que no será un personaje relevante en la temporada final?
Puedes seguir «The Leftovers» Temporada 3 a través de HBO España, Movistar Series y Yomvi.