El sicario enamorado
El subgénero de las buddie movies tan sobreexplotado en las décadas de los 80 y 90 regresa cada cierto tiempo a las carteleras, fruto de la nostalgia y la constante necesidad de Hollywood de aferrarse a fórmulas más o menos infalibles de cara a la taquilla. Con la estupenda “Dos Buenos Tipos” todavía reciente en la memoria, “El Otro Guardaespaldas” llega a las pantallas con el carisma y la vis cómica del tandem formado por Ryan Reynolds y Samuel L. Jackson como principal aval.
El film trata de aferrarse a esa fórmula clásica fusionando comedia y acción pero, a diferencia del mencionado film de Shane Black protagonizado por Gosling y Crowe, la mezcla resultante es algo menos homogenea. En esta ocasión la balanza acaba decantándose ligeramente hacia el lado de la acción, que acaba presidiendo la mayor parte del metraje.
Una trama principal de lo más sencilla (llevar a alguien del punto A al B a la fecha y hora señaladas) avanza a base de tiros, puñetazos y persecuciones que se suceden a un ritmo frenético y con una violencia exagerada, rozando lo caricaturesco. Entre un tiroteo y otro se desarrolla la relación entre ambos protagonistas que divierte aunque abuse del humor físico y se eche de menos más cantidad de gags memorables a nivel de guión y diálogos.
De esta manera el film deja casi todo su potencial cómico en manos de la incuestionable química entre Reynolds y Jackson, este último imperial y comodísimo autoparodiándose y batiendo su propio record de “motherfuckers” exclamados en una sola película. Ambos tiran de todo a su alcance para hacer funcionar la película aunque no deja de ser sintomático que los momentos más divertidos de la cinta sean los protagonizados por Salma Hayek, cuyos apenas 15 minutos en pantalla saben a muy poco (¡spin-off de su brutal personaje ya, por favor!)
Con el placer que siempre supone ver en pantalla a Gary Oldman (aunque sea interpretando con el mínimo esfuerzo a un villano bastante plano y estereotipado) y la introducción de la subtrama romántica que, además del memorable personaje de Hayek, aporta frescura y suaviza el tono violento mostrando que incluso el más mortífero de los sicarios también tiene su corazoncito, “El Otro Guardaespaldas” cumple con creces como divertimento veraniego pero se queda a un pasito de convertirse en una joyita dentro del subgénero. Una pizca menos de acción y un tratamiento de guión algo más trabajado en el plano cómico seguramente hubiesen terminado de rematar un producto mucho más redondo.
“El Otro Guardaespaldas” se estrena en España el próximo 25 de Agosto.
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